La tecnología blockchain ha cambiado las reglas del juego en varios sectores, y la industria farmacéutica no es una excepción. Gracias a su naturaleza descentralizada y transparente, la cadena de bloques tiene un enorme potencial para revolucionar el desarrollo de medicamentos, la gestión de la cadena de suministro, los ensayos clínicos y la seguridad de los datos de los pacientes.
